Desde esta disciplina escribo unas pocas líneas para recomendarles algo tan simple y maravilloso como
estar consigo mism@. En estos tiempos tan turbulentos poder apartarse del mundanal ruido y hacer un alto
en las múltiples corridas por obligaciones, deseos o contagios cotidianos es un privilegio.
Yo me tiro al piso y me entrego a él con mis 62 kilos para que me sostenga. El me sostiene ,seguro.
Comienzo a sentir un cambio en la respiración, Que será??? Circula.
La siento desde mis bostezos hasta los pies. Que maravilla!!!
Recorro mi cuerpo con las sensaciones que van apareciendo poco a poco.
Cuerpo perezoso, desprejuiciado, amable, respetuoso de mis males, y me dejo estar.
Pasan unos minutos, mas bostezos, mas sensaciones livianas que me invitan llegar al interior.
Y asi viajo con mis nuevas sensaciones de afuera hacia adentro, y de adentro hacia afuera.
Que totalidad esta materia que me mueve, viajo con solo dejarme ir. Luego rolo,.rolo a mi derecha sin conducirme y comienzo a sentir mis otros espacios que existen en mi ser..
Me mueve las ganas de moverme.Sentir el piso que me conduce.¿Adonde?
Al infinito, entregando mi voluntad al movimiento. Continúo bostezando.
Ahora exhalo un suspiro. Qué maravilla!! Yo no hice nada. Solo dejo hacer.
Y así, sin mas, continué rolando al otro lado sin saber adonde llegar.
Mis dos hemisferios se unieron sorprendentemente para llegar adonde quería llegar.
Para mi esto se llama sabiduría corporal. Dejar "hablar" al cuerpo.
Hablé mucho, me puse al día. Y así agoté todos mis deseos. Qué bellos que son.-
Se lo recomiendo, me lo van a agradecer. TT